SAN IGNACIO DE LOYOLA/MUERTE DE SAN FRANCISCO JAVIER

Hola amigos:
Aun cuando me apetece mucho cambiar de registro, creo que es mejor ser un poco ordenados (yo lo soy bastante como sabeis) y dado que todavía hay material de San Ignacio de Loyola, continuar con aportaciones relativas a su iconografía. Esta medalla que si mal no recuerdo fue de mi colección (alguien me convencería para que se la vendiese imagino, debilidad que tuve en contadas ocasiones tratándose de estas piezas), dentro de su gran difusión en cuanto a "iconografía", aporta la particularidad de su forma redonda y "sobre todo" de su material (plata) tan infrecuente en las medallas de devoción de los SS. XVII y XVIII.



S. XVIII. Plata. Redonda. 34mm. 18,1 grs. Con asa perpendicular.

Anv.: Busto del santo girado hacia la izquierda, con bonete tricornio y esclavina. Tiene el libro de la regla en sus manos, sobre el que se puede leer la inscripción, en la página izquierda: AD/ MAI/ OR/ DEI, y en la derecha: GLO/ RIA/ RE; y la vista levantada hacia el escudo de la Orden de los Jesuitas orlado por rayos. Alrededor la leyenda: S. IGN. DE. LOYOLA. SOC. I.

Rev.: El santo con nimbo en cerco y un crucifijo entre sus brazos, postrado en un camastro bajo una techumbre de paja, sobre la que hay dos querubines y llega un haz de rayos que desciende del cielo. A la derecha y al fondo, se ve un barco flotando sobre un mar tormentoso. Alrededor la leyenda: S. FR. X.


Rfcia. nº 461 del apartado Catálogo de "La Medalla de Devoción en Europa entre los siglos XVI y XIX".
(C) De los textos y fotografías: Fernando Sainz Varona (2.008).

Otra bonita medalla y además en plata, realmente escasas en la época. Muy bien conservada, aunque de iconografía muy recurrente en este tipo de acoplamientos entre san Ignacio con el libro de la regla y la escena de la " Muerte del misionero San Francisco Javier " en la isla de Sanchón. A propósito de esta escena he leído una interpretación iconográfica muy interesante, que ya comentaremos.

Muchísimas gracias por ampliar de forma tan fantástica esta gran selección que Julius pacientemente va situando en el compendio de medallas ignacianas que inició.

saludos cordialísimos
tesayma