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la historia de la estatuilla de Notre-Dame-de-Foy
En 1609, en una parcela de tierra y bosque llamada Foy, cerca de Dinant (Bélgica), un carpintero, el Sr. Gilles de Wanlin, taló un enorme roble para obtener madera. Trabajaba para un armador que necesitaba madera para reparar su flota.
A pesar de su hermoso exterior y su gran tamaño, el árbol apenas podía utilizarse como madera de trabajo porque su interior estaba plagado de gusanos. Se decidió cortarlo para hacer leña. Fue entonces cuando se encontró una estatuilla de la Santísima Virgen con el Niño Jesús en su brazo derecho.
Como esta estatuilla se encontró en Foy, se dio el nombre de Notre-Dame-de-Foy a la Virgen con el Niño así representados por esta estatuilla. Sin embargo, en realidad, la estatuilla pudo encontrarse en el hueco del árbol donde fue colocada por los peregrinos casi dos siglos antes. La corteza cubrió la estatua, y como la ruta de peregrinación era cada vez menos frecuentada, quedó olvidada e ignorada durante muchas décadas.
La devoción popular siguió al descubrimiento y se erigió una capilla en el lugar. En 1616 se registró un milagro, reconocido como auténtico por las autoridades religiosas.
En 1622-1624 se erigió un santuario mariano a seis kilómetros al este de la ciudad belga de Dinant.
Durante el siglo siguiente, se organizaron numerosas peregrinaciones para visitar este nuevo santuario mariano. Un número impresionante de peregrinos acudió a la región, hasta entonces aislada y poco habitada.
La fama de esta nueva devoción pronto se extendió más allá de los límites de la región de Foy. Los jesuitas difundieron el culto de Notre-Dame-de-Foy en sus diversas misiones, incluidas las de América, utilizando la estatuilla de la Virgen con el Niño.
Con la madera de roble en la que se encontró la estatuilla se fabricaron muchas otras estatuillas similares a la original.
Al parecer, con el envío de estas estatuillas de Notre-Dame-de-Foy, el culto a la Madonna de Foy se extendería, e incluso provocaría milagros en los lugares donde se exhibiera.
LA ESTATUILLA MILAGROSA
Realizada en un molde de época gótica, la Madonna de Foy se inspira en una Madonna del célebre pintor flamenco van Eyck. Debió de fabricarse en Utrecht hacia 1400, ya que allí se descubrieron estatuas similares y los moldes utilizados. Un mercader holandés tuvo que transportar la famosa estatuilla a la región de Dinant, y un devoto tuvo que colocarla en un hueco del roble de Foy, protegida por barrotes. Al crecer, el árbol cubrió la estatuilla.
Amitiés
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